Una mujer que tenía un resfríado, estornudo con tanta violencia que le salió de la nariz la punta de un palo de billar, que había estado en su nariz durante doce años.
Pero después de que la punta del taco de 2 centímetros apareció, se determinó que el taco estaba cubierto con un tejido que había crecido sobre ella, sus enfermedades se remontan a un accidente que sufrió en 1999.
La madre de tres niños Chantel, se encontraba en un bar cuando un amigo que tenía el taco en sus manos, le dio un abrazo del oso, y el taco se le introdujo por la boca.
Fue llevada al hospital. Sin embargo, los médicos le dieron sólo alivio al dolor que sentía. Si le hubieran hecho rayos X, habría mostrado que la punta atravesó un hueso de la mejilla. Se abrió camino a una fosa nasal.
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